Autor: Over Córdoba Rentería
Hoy, cuando he logrado un avance importante en la maduración de un
pensamiento que aún está tierno y no deja de buscar razones para explicar el ¿por
qué? de las cosas que ocurren a mi alrededor pude también interpretar de manera
razonada que estudiar lengua, ser sociólogo, abogado, ingeniero,
administrador de empresas, trabajador social, biólogo, químico, tele
informático, galeno y docente, en fin;
tener una profesión en nuestro país no
ha sido una garantía para tener una excelente calidad de vida, solo ha
alcanzado para que algunos logren parcialmente comodidades que no los coloca
por arriba o los exime de la miseria que
viven las poblaciones en donde estos residen.
Miremos lo que en realidad ha sido, es, y temo seguirá siendo nuestro semipaís:
una esfera con puntos estratégicos en donde solo aquel que los descifre
puede llegar a vivir feliz y cómodo; una entidad con premios mayores y menores,
los cuales se han ganado la clase poderosa del país y los supuestos
profesionales administrativos de las
regiones que manipulan a sus conciudadanos arrebatándoles la lotería con
acuerdos de repartición colectiva pero
luego deciden que no alcanza para todos; una lucha por los territorios que aun
así han sido arrebatados; una lucha de ideología política entre gobierno
central y grupos al margen de la ley, donde aún no sabemos cuál de ellos tiene
la razón o cual de los lados es el
verdaderamente subversivo, si el gobierno que basándose en la ley abusa de su
poder para lograr sus objetivos o los grupos al margen de la ley que luchan por
una supuesta injusticia cometida que en
la realidad confunde a la población civil, ya que se evidencian, también, intereses
particulares.
Tenemos una nación donde la gerencia permite la explotación de los
recursos naturales, otorgándole permiso a multinacionales y dando paso al
maltrato natural con la tala de los
bosques y la explotación minera, dejando así nuestro país sin recursos
naturales renovables e irrenovables y sin fauna y flora; un país donde la
inequidad, desigualdad, e injusticia social, es mayor cada vez que se habla y
se plantea trabajar con sus antónimos; un país donde los derechos de salud, educación y los bienes y servicios son
violados, es decir, no se cumplen a pesar de estar contemplados en la
constitución política, y las oportunidades para la población vulnerable afro
descendiente e indígenas son cada vez menores; un país donde hay mucha oferta y poca demanda, donde los
profesionales que se forman en él, tienen que salir fuera del mismo en busca de
oportunidades; un país donde se reforma a conveniencia de los dirigentes o
reformadores; un país donde los gobernantes locales no gestionan para su región
y municipalidades si no que se dedican a distribuir entre ellos lo poco que
llega a sus poblaciones, además, no generan fuentes de empleo que den lugar a
sus propias economías; un país con una sociedad donde se atacan entre los
mismos; un gobierno nacional que más que interesarle la calidad solo busca una
cobertura gigantesca que deteriore aún más
lo poco de la calidad educativa que queda.
¿Será este un país verdaderamente democrático? ¿Será
justo confiar en las estipulaciones de un gobierno que históricamente ha sido
injusto? ¿Será que la baja calidad en la educación es la que ha permitido que
algunas ciudades y municipios del país estén más, o menos desarrollados unos que
otros? ¿Será que la generación adulta tiene la facultad de decidir el futuro de
la población joven? ¿Habrá jóvenes con la capacidad e idoneidad para construir
su propio futuro?
¿Es justo perder el tiempo en un país donde el gobierno central se la
ingenia para hacer su voluntad? ¿Será justo que además de que el gobierno
nacional nos quiera quitar el derecho de la educación, algunos jóvenes de
protagonismo vistoso quieran decidir el destino de muchos? ¿En un país donde la
forma de vida de los grupos minoritarios y étnicos ha sido, es y se está colocando cada día más difícil es
recomendable no educarse? ¿Quién debe decidir tu futuro tus padres, hermanos,
amigos, particulares o tú? ¿Prefieres ser competente, útil, idóneo y reconocido ante el mundo por tu talento? o ¿incompetente, inútil, torpe y
un completo y total desconocido para la historia?
Pienso que las respuestas a los
interrogantes anteriores serán un
referente importante para formularnos unos nuevos que nos permitan descifrar
los puntos estratégicos para nuestro desarrollo y así poder construir un futuro
prometedor, es de una persona sabia creer
y saber que la situación del país y la condición en la que como miembros del
territorio nacional nos encontramos, no está para perder el tiempo y menos para
detenerlo o dejarlo pasar en vano, es de entender que cuando a todos los hijos
se nos ofrecen las mismas oportunidades no es responsabilidad de ninguno el futuro
del otro, pero sí debe haber cooperación mancomunada.
Partiendo de lo anterior, puedo de acuerdo a lo planteado en los
primeros renglones del texto, hacer una transversalizacion cognitiva que nos
permitirá mantenernos independizados de tanta patraña de dominación que
deteriora nuestro entorno sin detenerse; ello me permite sugerir que no solo hay
que ser lingüistas si no sociólogos, no solo ingeniero si no también administrador de empresas, psicólogo, bioquímico, abogado, agricultor,
pescador y docente etc. De esta manera no será difícil estar en un mundo donde
a medida que pasa el tiempo tendremos que buscar sobrevivir porque ya no habrá
calidad de vida, sobrara la ética, no hará falta el respeto porque abundara el
abuso. Con las nuevas reformas constitucionales más que todo en lo que
corresponde a la educación, el gobierno lo que busca en sí, no es la calidad si
no la productividad y la productividad no designa otra cosa más que el saber
hacer para poder entrar al mundo laboral ya que debido a los tratados de libre
comercio se acabaran los protocolos educativos, las etiquetas y todos los actos
que no se refieran al hecho de producir más y más para que otros puedan crecer
sus propias economías a costa de pequeños y vendidos países como el nuestro, es
decir que hemos regresado al histórico capitalismo.
Ahora, no olvidemos que no serán los hijos de la clase adinerada los que
producirán o transformaran la materia prima para exportación, si no los hijos
del proletariado o clase trabajadora. Por ello, no es conveniente perder el
poco tiempo que se nos dedica en las instituciones educativas tanto en básica como superior,
porque nos hará falta para podernos desempeñar y afrontar un mundo donde las
dificultades pueden olerse a kilómetros, recordemos que para transversalizar tendremos
que poseer conocimiento transdisciplinar que nos permita constituirnos en
personas de pensamiento científico e innovador y ante todo critico que conglomere
todos los conocimientos universales posibles, entendamos que la experiencia se
adquiere a través de la práctica pero el conocimiento solo estará sujeto al
claustro educativo y a las investigaciones de autoformación que se realicen, y será
este el motor que nos llevara a la experiencia; no permitamos que el gobernó
nacional nos desestabilice porque no aremos otra cosa más que darle la razón,
lo importante en nuestra vida debe ser capacitarnos, cualificarnos y cambiar la
historia.
Jóvenes, entendamos que la situación política- administrativa de nuestro
país no está buscando una calidad de
vida excelente para todos, sino para algunos; por eso, debemos prepararnos para seguir sobreviviendo y avanzar aun en las inclemencias
y desigualdades que están arraigadas en la estructura social que reforman a diario en nuestro país, de allí
la importancia de adquirir competencias que nos permitan en nuestro juego,
dejar en fuera de lugar la desigualdad,
la inequidad y la injusticia social, política, cultural y económica que son las
armas con las cuales han combatido los poderes legislativo, judicial y ejecutivo de nuestra sociedad. Después
de nuestras actuaciones en la vida profesional y laboral podremos llegar a
anotar el golazo que nos permitirá tener una forma de vida no buena o excelente
pero si regular. Tengamos presente que el conocimiento entre más novedoso y
complejo, será más eficaz para
defendernos y atacar de manera inteligente; hagamos todo lo posible para que la
ignorancia no nos lleve a la servidumbre y lo necesario e importante para que
la educación nos conduzca a la libertad,
como alguna vez lo dijo nuestro ilustre “DIEGO LUIS CORDOBA”.
¡Seamos protagonistas de nuestra propia historia!...
hagamos de la lengua un verdadero
instrumento de expresión para dar a
conocer nuestros pensamientos y
sentimientos y así lograr eficiencia y eficacia en nuestro actuar profesional.
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